AGENDA

jueves, 23 de julio de 2009

“¡Tan complicados los simples mortales, y tan fácil saber que se traen entre manos!”

Pocas veces una frase tan cortita como concreta me llevo a reflexionar tanto como ésta que te presento. Capaz ya la conocés; lo más probable. Entiendo que al mirarla casi sin detenimiento te parezca que no dice nada nuevo o nada que nadie se haya atrevido a pensar antes. Pero no se por qué, y poco me importa, ésta me condujo por el sinuoso sendero de las reflexiones. Creo que todo surgió de una charla con un Sol.
Me alejo de todo el palabrerío del párrafo anterior y me dedico a lo que realmente me importa…hacerte pensar acerca de estas palabras, o al menos que termines de leer esto que hoy escribo (sigo con el palabrerío). Simplemente se trata de detenerse un minuto, observar a nuestro alrededor y darnos cuenta que esas cosas que buscamos constantemente en libros y películas muchas veces son parte de nuestra realidad. Realidad que en estos casos nada le debería envidiar a la ficción. Pero aquí aparecemos nosotros, los “tan complicados simples mortales”, empecinados en encontrar esa vida de fantasía que muchas veces tenemos enfrente de nuestras narices y no la comprendemos o sencillamente no la sabemos valorar. Puedo mencionar cientos de hechos hermosos en los que uno no se detuvo pero que, al recordarlos, se hacen difíciles de creer. Desde una caminata a orillas de un mar remoto viendo caer el sol, hasta el simple paseo en un rodado junto a un lago espejado. Imágenes que no viven más que en la imaginación de muchos, pero que otros tienen el privilegio de vivir.
Lo de “y tan fácil saber que se traen entre manos” es tan obvio como lo que acabo de plasmar en estas palabras. No le dedico tiempo.


Ramo

No hay comentarios:

Publicar un comentario